Los papeles de la mesa de mi jefa hacían hoy ondas; se interponían entre ella y yo olas de administración y burocracia: archivador pleno abierto, carpeta transparente casualmente apoyada sobre su esquina, montículos breves de papeles grapados, lo urgente en forma sinuosa de post-it amarillos.
Como en un rescate de naufragio, la foto de familia sobre el ordenador y el recuerdo de un viaje a Italia...
Como en un rescate de naufragio, la foto de familia sobre el ordenador y el recuerdo de un viaje a Italia...
Pues cómo estaría la cosa, para evocar a la balsa del Medusa.
ResponderEliminarUn abrazo.
Querida menina:
ResponderEliminarespero que estés muy bien... estoy "paseando" por tu blog para ver si hoy había alguna palabra dedicada a Marcelino Camacho... si, ese sindicalista de CCOO, perseguido y encarcelado por la derecha más reaccionaria. Y persona de alta dignidad, honradez y generosidad. Viva la lucha obrera!!!!! La izquierda, los sindicatos y los sindicalistas son ahora más necesarios que nunca para luchar contra el monopolio empresarial y cambiar el rumbo de esta decadente sociedad capitalista.
Me ha encantado la comparación
ResponderEliminarPerikiyo,
ResponderEliminarme decía luego mi jefa que los papeles burocráticos no pueden ser frontera, sino escondites de la vida. Unos días estresantes estos en el cole, aunque invisibles de cara al público.
Un abrazo.
Querido menino:
ResponderEliminarme acordaba de ti al saber la noticia que me dices. No has encontrado ninguna palabra sobre él, no por motivos políticos afines o no, sino porque he estado dos días ocupada fuera de mi casa y el agotamiento al llegar me impidió escribir nada más allá de lo mío cotidiano.
Un beso y buen regreso a Honduras :-)
Ulises,
ResponderEliminary qué real a veces en lo escolar, ¿no?
Un beso.