Viniendo del parque de llenarnos las manos y las sandalias de tierra:
- Mmmmmamá....
- ¿Hum?
- ¿Por qué tenemos que irnos a casa ya?
- Porque ya va a ser de noche -dice Mamá, comprobando que son las ocho de la tarde, pero esto promete largo- y van a salir las estrellas.
- Las estrellas no, mamá, la luna. ¡Que t'as equivocaoooo!
- ¿Y las estrellas no salen de noche?
- No, mamá. Sólo la luna. Las estrellas están en la tripa de la luna.
- Ah. Hum.
Pues creo que, en el fondo, tu hija tiene razón. Porque, al fin y al cabo, las estrellas son las hijas de la Luna.
ResponderEliminar:)
Es impresionante cómo se ven las cosas a través de los ojos de un niño. Qué pena hacernos mayores y perder esa inocencia.
ResponderEliminarMiniSchoch,
ResponderEliminarun amigo mío decía que la luna era un poco traicionera porque nunca nos muestra su verdadero rostro...
Besos.
Kassiopea,
ResponderEliminarNiña Pequeña tiene una gran preocupación diaria por la luna, porque no comprende por qué puede aparecer cuando está el sol. La debe de ver un poco desobediente, tal vez ;-)
Besos.