La traición sabe a hielo frío del congelador de mi cocina y a lágrimas furiosas de rabia e impotencia.
Hoy me mintió -o descubrí que me mentía.
E xisten entre nosotros unos seres únicos, que viven prácticamente de incógnito: los noseabundos . Los noseabundos se mimetizan perfectamen...
Contra la tragedia de la traición, sólo existe el antídoto doloroso y pacífico del perdón.
ResponderEliminar¡Vaya, cómo lo siento!
ResponderEliminarSeguro que encontrarás las atenuantes que te ayuden a perdonar.
Ánimo, Negre.
José Luis, Pepe... En el pecado iba ya la penitencia, pero la mentira y el olvido es la infidelidad a la palabra dada, y eso...
ResponderEliminarHoy no hay palabras.