Y todo se detiene, parece, cuando las maletas están ya a punto de cerrarse... O quiero detenerlo todo, creo, para que cuando vuelva del viaje el trabajo se deshiele...
- Negre -me llama Él.
-¿Hum? - digo, sin levantar apenas la vista de la pantalla.
- Necesitas un despacho. Tus cosas del trabajo cada vez invaden más mesa en el salón -afirma.
- Tienes razón. Y además, me ahogan -añado. Con tristeza.
19 días, Negre ;)
ResponderEliminarSaludos!