Y encima, creo, no se venden por separado. Te roban uno y ¡hala! a comprar la pareja. A este respecto, mejor será que guardes el existente restante tras el hurtamiento y disfrutes de la nueva visión, ahora homogénea, no sea que veas más en un sector que en otro del parabrís, lo cual es desconcertante y fatigoso de la visión a la hora de manejar el auto. Aún se lo tendrás que agradecer a tu cleptómano. Que por cierto: ¿porqué le llamas "gracioso" si no tiene maldita la gracia? Eres una madraza, Negre.
Afortunadame, en mi taller me vendieron uno y además, lo colocaron... De madraza nada: es que como no nos riamos... Es un daño colateral de mi trabajo, que ya sabes que tiene un plus de peligrosidad.
Y encima, creo, no se venden por separado. Te roban uno y ¡hala! a comprar la pareja. A este respecto, mejor será que guardes el existente restante tras el hurtamiento y disfrutes de la nueva visión, ahora homogénea, no sea que veas más en un sector que en otro del parabrís, lo cual es desconcertante y fatigoso de la visión a la hora de manejar el auto. Aún se lo tendrás que agradecer a tu cleptómano. Que por cierto: ¿porqué le llamas "gracioso" si no tiene maldita la gracia? Eres una madraza, Negre.
ResponderEliminarJosé Luis
Afortunadame, en mi taller me vendieron uno y además, lo colocaron... De madraza nada: es que como no nos riamos... Es un daño colateral de mi trabajo, que ya sabes que tiene un plus de peligrosidad.
EliminarUn abrazo.
Ver para creer. Como dice uno de mis 'sabios' alumnos: I'm flipping.
ResponderEliminarEspero volver a comentar pronto y que sea para alegrías. ¡Felices Fiestas!
Un saludo, Laura.
Un daño colateral de ser profesor, Laura...
EliminarUn saludo.
Jajaja, qué enrollados en tu taller, no lo dejes nunca.
ResponderEliminarJosé Luis.
No, no, desde luego.
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