- Ven, venga, toma tu regalo de cumpleaños -dijo.
Abandoné el sofá y la lectura que tenía asociada; era 23 de abril, el día anterior a mi trigésimo quinto cumpleaños y en el fondo, yo era consciente de que intentaría superarse a sí mismo al pensar en el regalo que me ofrecería esta vez. Entré en la habitación -él es capaz de casi todo- y le vi metiendo algunas cosas en la maleta.
- Pon tus cosas: nos vamos. Todos lo saben menos tú. Dos días nada más y no puedes llevarte tu ordenador.
Sin preguntar demasiado terminé de hacer lo que él había empezado. Sólo pregunté si volveríamos el domingo a la hora de comer, pues ya me imaginaba que Niña Pequeña se quedaría el fin de semana en casa de sus abuelos. Dije adiós a mi ordenador, a su conexión a internet, a los amigos en la red, a la vida social que supone la pantalla... Ni en la estación pude saber cuál era el destino, ya que no me dejó comprar los billetes o mirar las pantallas; yo sabía que en el fondo él estaba disfrutando más que yo, que simplemente me dejaba arrastrar.
Algunas horas después estábamos en medio de mi regalo: un tranquilo fin de semana alejada de trabajo y de cualquier persona o cosa conocida, rodeada de aromas, aguas termales y relajantes masajes para esta paciente espalda. El misterio quedaba desvelado.
He cumplido 35 años, que no sé si es mucho o poco, pero me ha dado tiempo a hacer mucho y ser más. No tengo miedo a lo que vendrá y contemplo la presencia del futuro con calma.
Abandoné el sofá y la lectura que tenía asociada; era 23 de abril, el día anterior a mi trigésimo quinto cumpleaños y en el fondo, yo era consciente de que intentaría superarse a sí mismo al pensar en el regalo que me ofrecería esta vez. Entré en la habitación -él es capaz de casi todo- y le vi metiendo algunas cosas en la maleta.
- Pon tus cosas: nos vamos. Todos lo saben menos tú. Dos días nada más y no puedes llevarte tu ordenador.
Sin preguntar demasiado terminé de hacer lo que él había empezado. Sólo pregunté si volveríamos el domingo a la hora de comer, pues ya me imaginaba que Niña Pequeña se quedaría el fin de semana en casa de sus abuelos. Dije adiós a mi ordenador, a su conexión a internet, a los amigos en la red, a la vida social que supone la pantalla... Ni en la estación pude saber cuál era el destino, ya que no me dejó comprar los billetes o mirar las pantallas; yo sabía que en el fondo él estaba disfrutando más que yo, que simplemente me dejaba arrastrar.
Algunas horas después estábamos en medio de mi regalo: un tranquilo fin de semana alejada de trabajo y de cualquier persona o cosa conocida, rodeada de aromas, aguas termales y relajantes masajes para esta paciente espalda. El misterio quedaba desvelado.
He cumplido 35 años, que no sé si es mucho o poco, pero me ha dado tiempo a hacer mucho y ser más. No tengo miedo a lo que vendrá y contemplo la presencia del futuro con calma.
Felicidades por tu cumple, vaya regalito mas bueno que has tenido. Este mes tambien es mi cumple, somos flores de primavera. Te deseo todo lo mejor. Besos.
ResponderEliminarGracias, Princess. Creo que por tu blog se avecina una estupenda fiesta. Felicidades para tí también. Flores, lilas.
ResponderEliminarUn saludo.
Que suerte, madame! Cuando seré yo capaz de contemplar cualquier cosa con calma? Supongo que no va con mi naturaleza.
ResponderEliminarNada mejor que celebrar el cumpleaños con un viajecito, madame. Yo tambien lo hago cuando puedo, que es cuando cae por semana santa.
Buenas noches
Bisous
Viene bien relajarse, aunque sea de vez en cuando.
ResponderEliminarSiempre hay muchas cosas que hacer, por lo que vamos dejando para luego nuestro propio disfrute.
Supongo que habrás echado un poco de menos a Niña Pequeña, pero bueno, un fin de semana se recuperan en un santiamén.
Saludos.
Felicidades, que buena edad la tuya.
ResponderEliminarYo tambien quiero unas burbujas y unos tratamientos de esos de chocolate y barro,
pero me parece que me los tendre que regalar.
Besos.
Gracias a todos... El viaje fue relajante, las burbujas más y pronto recuperé las horas perdidas sin ver a Niña Pequeña...
ResponderEliminarSaludos.